A lo largo de nuestros procesos utilizamos diferentes tipos de productos, aconsejados por nuestros proveedores, para desengrasar y limpiar.
Estos productos pueden ser líquidos, sólidos o bien en polvo y casi siempre van acompañados de agua, para conseguir una buena limpieza.
Además de conseguir dicha limpieza o desengrase, mediante estos productos conseguimos protegerlos contra los agentes externos (pasivado).